
Mi confesión de escalada
Casi dejo que mi amigo muera en una escalada deportiva corta en Red Rock. Estábamos usando una cuerda que tenÃa un disparo central a unos tres metros del final. El lÃder tenÃa ventaja al final sin el disparo central, por lo que mi amigo debÃa atarlo al extremo del disparo central para limpiar la escalada en la cuerda superior.
Para mantener el disparo central fuera del sistema, até un ocho en una ensenada por encima del disparo central y lo sujeté con un mosquetón de seguridad. Pensando que todo estaba seguro ahora, bajé la guardia.
Fogata: sin ancla
Cuando llegó a la cima de la escalada, fue directo a las anclas y sujetó la cuerda a través de los permadraws. SIN EMBARGO, tenÃa dos extremos de la cuerda colgando del mosquetón de seguridad en su lazo de aseguramiento: un extremo volvió a bajar al asegurador, y el otro bajó al tiro central y al final de la cuerda.
Cortó el último extremo a través de los permadraws, se fue directo y se inclinó para bajar.
No era tan empinado allà arriba, asà que no se dio cuenta de que la cuerda no estaba apretada hasta que habÃa bajado unos metros. Luego, entró en pánico y agarró el extremo del disparo central de la cuerda, sosteniendo efectivamente su lÃnea de vida en sus manos. Lo hicimos pasar a otro permadraw y continuar directamente con eso, y lo derribamos, pero fue una experiencia realmente aterradora.
La leccion que aprendi
Siempre pese el sistema antes de bajar. ¡Verifique dos veces su sistema! Cuando encuentre un disparo central al final, córtelo de inmediato. ¡Vigila a tus socios!